10 posturas para dormir del gato cuando está enfermo y otros signos de dolor

posiciones para dormir del gato cuando está enfermo

No es ningún secreto que a los gatos les encanta echarse la siesta.

El gato medio duerme unas 15 horas al día, mientras que algunos felinos más viejos y perezosos duermen la friolera de 20 horas. A los gatos también les encanta dormir en un montón de posturas contorsionadas, ¡muchas de las cuales parecen muy incómodas!

Sin embargo, el letargo también es un signo de enfermedad y depresión. Como los humanos, los gatos duermen con más frecuencia y tienen menos energía cuando están enfermos que cuando están sanos y en forma. Las posturas del gato cuando está enfermo también pueden ayudar a identificar cualquier problema subyacente o sensación de malestar, por lo que es esencial que prestemos atención a cómo duermen nuestros gatos.

Pero, ¿cómo se tumban los gatos cuando están enfermos? Un gato enfermo puede adoptar varias posturas al dormir, que también son frecuentes en los gatos sanos. Por eso es importante fijarse también en cualquier otro signo de dolor o enfermedad. La excepción es la postura del pastel de carne del gato. Los felinos sanos rara vez duermen así, por lo que puede ser un signo seguro de enfermedad.

En este artículo, repasaré algunas posturas habituales de los gatos al dormir y lo que cada una de ellas podría significar para la salud de tu gato. También repasaré otros signos de dolor y enfermedad. De este modo, te asegurarás de que tu gatito reciba un tratamiento rápido y vuelva a ser el de siempre en poco tiempo.

Contenidos
  1. Posiciones para dormir del gato cuando está enfermo
    1. Acurrucado en una bola
    2. Dormir sobre tu pecho
    3. Boca arriba
    4. Gato tumbado boca abajo
    5. Posición de Pan de Gato
    6. Patas extendidas
    7. Posición del pastel de carne de gato
    8. Tumbado de lado
    9. Dormir con un ojo abierto
    10. Siempre en la misma posición
  2. Otros signos de enfermedad y dolor
    1. Cambio en el apetito
    2. Aumento de la sed
    3. Vocalización excesiva
    4. Cambios de personalidad
    5. Cambios en el comportamiento de acicalamiento
    6. Problemas con la caja de arena
    7. Cambios en los ojos
    8. Niveles de actividad reducidos
  3. CONCLUSIÓN

Posiciones para dormir del gato cuando está enfermo

¡A los gatos les encanta doblar el cuerpo en todo tipo de posturas! No puedo ser la única que se maravilla ante las extrañas elecciones de mi gatito para dormir. Desde tener las patas detrás de la cabeza hasta sentarse en posición de pan, su flexibilidad y sus graciosas peculiaridades son lo que les hace tan adorables.

Por desgracia, no todas las posturas son buena señal. A continuación encontrarás una lista de todas las posturas preocupantes de los gatos para dormir que podrían indicar dolor o enfermedad.

Acurrucado en una bola

gato durmiendo en posicion acurrucado en una pelota
gato durmiendo en posicion acurrucado en una pelota

Una de las posturas más habituales en las que puedes ver dormir a tu gato es acurrucado en una pelota. Es una de las posturas más acogedoras y, sin duda, una de las favoritas de mi gato. Al acurrucarse, a los gatos les resulta más fácil mantenerse calientes, ya que meten las patas y las orejas cerca del cuerpo, que es por donde se pierde la mayor parte del calor corporal.

Otra versión es la posición fetal. En esta versión, la cabeza de tu gatito también estará metida en su pecho, de modo que se acurrucará en un ovillo más apretado. Esta forma de dormir no sólo ayuda a los gatos a mantenerse calientes, sino que también puede ayudar a proteger cualquier herida que haya podido sufrir tu felino.

Aunque estas posturas para dormir no siempre son signo de dolor o enfermedad, podrían indicar que la temperatura corporal de tu felino ha bajado. Los gatos tienen una temperatura corporal central más alta que los humanos (aproximadamente 100 grados Fahrenheit) y no pueden regular su temperatura tan fácilmente.

Si un gato tiene demasiado frío, puede sufrir hipotermia; su temperatura corporal seguirá bajando hasta que su cuerpo se apague por completo. Entonces puede entrar en coma o, en el peor de los casos, morir. Por tanto, debes calentar a tu gato antes de que aparezca la hipotermia.

Para saber si a tu gato le cuesta mantener el calor, comprueba que el termostato esté ajustado a una temperatura adecuada. ¿Qué temperatura les gusta a los gatos? Bueno, esto depende de la raza, el tamaño, la edad y el estado de salud de tu gato. Dicho esto, como regla general, debes intentar mantener tu casa a una temperatura de al menos 60 grados Fahrenheit.

Dormir sobre tu pecho

gato durmiendo en mi pecho
gato durmiendo en mi pecho

Muchos propietarios se sienten halagados cuando su gato viene a dormir con ellos, ¡yo incluido! Cuando hay un gato durmiendo sobre mi pecho, me siento tan querido y conmovido que mi felino quiere acurrucarse conmigo. Sin embargo, ésta puede ser una posición preocupante para dormir.

Del mismo modo que acurrucarse hecho un ovillo podría indicar que tu gato tiene frío, dormir sobre tu pecho también podría serlo. Nuestro cuerpo desprende calor, por lo que tumbarse sobre nuestro pecho es comparable a que un gato se acurruque junto a un radiador o en un lugar soleado de tu casa.

Como los gatos se sienten atraídos por el calor, esto no es un signo definitivo de que tu gato esté luchando por mantenerse caliente, pero comprueba la temperatura de tu casa y ayuda a tu gato a calentarse si crees que corre el riesgo de desarrollar hipotermia.

Por desgracia, esta postura al dormir también podría ser una señal de que tu minino quiere protección mientras duerme. Muchos felinos también muestran este comportamiento con otros gatos de su casa. Sin embargo, tu gato sólo lo hará si está gravemente enfermo, ya que admitir su vulnerabilidad ante otro gato le haría menos dominante.

Boca arriba

gato durmiendo boca arriba
gato durmiendo boca arriba

Muchos propietarios piensan que cuando un gato se tumba boca arriba es señal de que se siente cómodo contigo. Si tu gato es siempre cariñoso, probablemente sea así. Sin embargo, los gatos también pueden dormir así para que sus garras y dientes estén en la mejor posición para protegerse. Esto será prioritario para cualquier gatito que se sienta vulnerable.

Además, un gato también podría estar tumbado boca arriba porque tiene demasiado calor, y esta postura le ayuda a perder calor y a refrescarse. Mi gata hace esto a menudo en verano cuando encuentra un trozo de sol.

Si la temperatura corporal de un gato aumenta demasiado, puede sufrir un golpe de calor. Este tipo de hipertermia puede acelerar el ritmo cardíaco y la respiración de tu gato, lo que puede conducir al coma y a la muerte.

Además de dormir en posición estirada, los gatos con insolación también tendrán las encías rojas, pueden empezar a jadear en un intento de refrescarse, y a menudo se cansarán mucho más a medida que se acerquen al agotamiento. También sufrirán náuseas y diarrea.

Si notas que tu gato tiene demasiado calor, ayúdale a enfriarse bajando la temperatura de tu casa, asegurándote de que tiene mucha agua cerca y acariciándole suavemente con una toalla húmeda. Si aparecen náuseas y diarrea, tendrás que concertar una cita urgente con tu veterinario.

Gato tumbado boca abajo

gato tumbado boca abajo
gato tumbado boca abajo

Cuando un gato se tumba boca abajo con las cuatro patas extendidas, se denomina espolotear. Es más frecuente en los perros, pero a veces los gatos también pueden adoptar esta postura. Les sienta muy bien, ya que les permite estirar las articulaciones de la cadera, y además tiene un aspecto adorable.

Además de aliviar la tensión muscular, otra razón por la que los gatos se tumban es para refrescarse. Tener el vientre plano presionado contra una superficie fría, como un suelo duro, puede ayudar a los gatos a soportar el calor en un caluroso día de verano.

Sin embargo, como ocurre con los gatos tumbados boca arriba, es esencial que estés atento a las señales de que tu gato tiene demasiado calor. Si tiene demasiado calor, ayúdale a enfriarse antes de que sufra un golpe de calor.

Posición de Pan de Gato

posicion del pan de gato
posicion del pan de gato

En la posición de la hogaza, el gato se tumba boca abajo y mete las patas delanteras debajo del cuerpo, como si fuera una hogaza de pan. Cuando los gatos duermen en posición de pan, suele ser buena señal. Meter las patas debajo del cuerpo les hace más vulnerables, ya que es más difícil escapar si se produce una situación amenazadora. Por tanto, es señal de que tu gato está cómodo.

Sin embargo, esta postura permite a tu felino permanecer más alerta y también podría ser señal de dolor, concretamente en las patas. Si tu gato siente dolor o molestias en la pata, podría meterla debajo del cuerpo como forma de protegerla. Entre los problemas más frecuentes en las patas están las uñas encarnadas, las heridas o los pequeños objetos clavados en la pata.

Para determinar los problemas exactos, debes inspeccionar las patas de tu gato. Sin embargo, espera a que tu felino se haya despertado. Sé que mi gato no es el único que odia que le saquen las patas de debajo de los pies.

Patas extendidas

gatos patas extendidas
gatos patas extendidas

Cuando duermen boca abajo, los gatos suelen estirar las patas hacia delante, en la típica posición de "vuelo". Como ocurre con la mayoría de las demás posturas, esta forma de dormir no siempre significa que tu gato esté enfermo. Mi gato duerme así a menudo, pero sé que es porque le resulta cómodo, no por ningún problema de salud subyacente.

Cuando un gato duerme en esta postura y tiene las patas separadas, puede indicar que tu minino se siente vulnerable: las patas separadas significan que puede escapar rápidamente si se siente amenazado.

A veces, las patas de un gato también pueden colocarse una junto a otra cuando están extendidas. Aunque hay cierta especulación al respecto, algunas personas afirman que esto podría ser un signo de problemas respiratorios, ya que la posición puede ayudar a abrir los pulmones.

Posición del pastel de carne de gato

gato durmiendo en posicion de pastel de carne
gato durmiendo en posicion de pastel de carne

La posición del pastel de carne para gatos es una variación de la posición del pan en la que tu gato está encorvado hacia delante, con la espalda arqueada hacia arriba y las patas debajo del cuerpo. Se inclinará hacia delante y dormirá con la cabeza hacia abajo y la barbilla en el suelo.

Todas las posturas que he mencionado ya pueden indicar enfermedad y dolor, pero también es muy probable que tu gato sólo quiera ponerse cómodo y se sienta a gusto. Sin embargo, la postura del pastel de carne no es así. Si tu gato está en la postura del pastel de carne, casi seguro que necesita atención médica, pues un gato moribundo suele preferir la postura del pastel de carne.

Esta postura podría indicar que tu gato padece una enfermedad renal crónica felina (ERC). En la ERC, los riñones de tu gato dejan de funcionar como deberían normalmente. Esto también puede hacer que tu minino se vuelva letárgico y tenga una mayor ingesta de agua.

Los gatos mayores son más propensos a padecer esta enfermedad y, por desgracia, no tiene cura. Sin embargo, es imprescindible que vayas al veterinario. Tu veterinario podrá detectar la ERC y decirte cómo tratarla eficazmente para reducir el dolor y cualquier otra complicación.

Tumbado de lado

gato tumbado de lado
gato tumbado de lado

Cuando un gato se tumba de lado, suele ser algo bueno. No está acurrucado, por lo que debe estar a buena temperatura, y se siente confiado y relajado a tu alrededor, ya que dormir de lado es una de las posturas más vulnerables para un gato.

Sin embargo, si tu gato está estirado de lado, puede tener dolor muscular o dificultad para respirar. Hacerse un ovillo o tumbarse boca abajo puede comprimirle los pulmones y dificultarle la respiración, mientras que estirarse de lado facilita la inhalación y la exhalación.

Si a tu gato le cuesta respirar, le oirás jadear y su respiración será fuerte y profunda. También puede jadear si le cuesta respirar por las fosas nasales, tiene problemas para acceder a su caja de arena o está mucho menos activo de lo normal.

Si tu gato está tumbado de lado mientras muestra alguno de estos síntomas, concierta una cita con tu veterinario.

Dormir con un ojo abierto

gato durmiendo con un ojo abierto
gato durmiendo con un ojo abierto

Puede que veas a tu gato durmiendo con los ojos abiertos. Esto nos parece extraño, pero los gatos son tanto depredadores como presas en la naturaleza y necesitan estar constantemente alerta, incluso cuando duermen la siesta. La presencia de un tercer párpado transparente significa que pueden vigilar lo que ocurre a su alrededor en caso de que necesiten huir, pero aún tienen tiempo para descansar.

Una variante de esto es que tu gato cierre un ojo mientras duerme. Se trata de una capacidad aún más inteligente de los gatos, denominada sueño unihemisférico de ondas lentas. Apagan la mitad de su cerebro conectada al ojo cerrado mientras la otra mitad sigue completamente consciente y alerta.

Sin embargo, tu gato podría estar durmiendo con un ojo cerrado no porque esté descansando inteligentemente la mitad de su cerebro, sino porque tiene una infección ocular u otra afección ocular que le hace doloroso mantener uno de los ojos abiertos. Sabrás si es así porque tu gato mantendrá un ojo cerrado durante todo el día, no sólo mientras duerme. Además, es probable que observes otros signos, como parpadeo excesivo, ojos rojos e hinchados o secreción ocular.

También es posible que tu gatito mantenga un ojo abierto para evitar caer en un sueño profundo. Los gatos que sufren dificultades respiratorias o infecciones urinarias pueden utilizar esta técnica para poder controlar su respiración y llegar rápidamente a la caja de arena.

Mi gato ya había mantenido siempre un ojo cerrado, ¡y me asusté mucho! Afortunadamente, mi gato sólo tenía conjuntivitis, que es la infección ocular felina más frecuente y puede tratarse fácilmente con antibióticos. Sin embargo, hay otras afecciones como el glaucoma, las úlceras corneales o la uveítis, por nombrar algunas, que varían en gravedad.

Si crees que tu gato tiene una afección ocular, llévalo al veterinario para que diagnostique el problema y le prescriba un tratamiento eficaz para aliviar el dolor y evitar complicaciones posteriores.

Siempre en la misma posición

posicion para dormir del gato
posicion para dormir del gato

A los gatos les gusta dormir en varias posturas. Se les puede encontrar durmiendo hechos un ovillo, tumbados de lado, en posición de pan o ¡en cualquier otra posición imaginable! Lo que quiero decir es que a los gatos les encanta la variedad, e intercambiarán y cambiarán su forma de dormir cada vez. Por tanto, si tu gato duerme siempre en una misma postura, puede sugerir que está enfermo.

Por ejemplo, si tu gato duerme siempre hecho un ovillo en el lugar más cálido de la casa, probablemente tenga demasiado frío y corra riesgo de hipotermia. Del mismo modo, si tu gato duerme con un ojo abierto constantemente, es probable que tenga una afección ocular que haya que examinar.

Esto significa que no sólo es importante la postura en la que duerme el gato cuando está enfermo; también hay que vigilar de cerca la frecuencia de estas posturas.

Otros signos de enfermedad y dolor

Aunque es importante conocer las posturas en que duerme el gato cuando está enfermo y lo que significan, las llamadas "posturas del gato enfermo" por sí solas no nos dicen demasiado. Debemos observar estas posturas y sus frecuencias junto con los cambios de comportamiento, el lenguaje corporal y otros síntomas.

He aquí algunas cosas clave a las que puedes prestar atención y que podrían indicar que tu gato está enfermo o tiene dolor.

Cambio en el apetito

Si notas un cambio en el apetito de tu gato cuando la comida que le das y su rutina de alimentación no han cambiado, podría ser un signo de enfermedad.

Un aumento repentino del apetito podría ser un signo de diabetes mellitus o hipertiroidismo. Ambos suelen ir acompañados de una pérdida de peso notable y una sed excesiva. Por ejemplo, mi gata siempre parecía hambrienta pero delgada cuando padecía hipertiroidismo.

Por otra parte, la pérdida de apetito tampoco es una buena señal. Podría ser un signo de infección, problemas intestinales, insuficiencia renal o cáncer. Los problemas dentales también pueden causar dolor a tu gato cuando come, lo que conduce a una disminución del apetito.

Aumento de la sed

Por naturaleza, los gatos no beben mucha agua, y muchos necesitan que se les anime a aumentar su ingesta de agua. Por tanto, si de repente tu gato bebe en exceso, no se trata de un comportamiento felino habitual y podría ser un signo de enfermedad.

Como se ha mencionado brevemente, el aumento de la sed es otro síntoma de diabetes e hipertiroidismo. También puede ser un signo de enfermedad renal. Sin embargo, también puede ser simplemente que tu gatito esté un poco acalorado y quiera una bebida refrescante. Mi gato suele beber más en verano precisamente por este motivo. En caso de duda, siempre es mejor pedir la opinión de tu veterinario.

Vocalización excesiva

Los gatos no suelen maullar sin motivo. Esta forma de vocalización está reservada exclusivamente a los humanos, y siempre que tu gato maúlla es porque está intentando comunicarte algo. Por ejemplo, mi gato maúlla para hacerme saber que está listo para cenar.

Si tu gato maúlla en exceso, puede ser su forma de decirte que está enfermo o tiene dolor. También puedes notar que tu gato ronronea sin motivo aparente o que te gruñe y silba a ti y a otros miembros de la casa. Haz que tu gato sea examinado por tu veterinario si presenta alguna vocalización inusual, para determinar la enfermedad o lesión que desencadena este comportamiento.

Cambios de personalidad

Cada gato tiene una personalidad única y maravillosa. Por ejemplo, algunos son seguros de sí mismos y bulliciosos, mientras que otros son más tímidos. Aunque es normal que todos los gatos sean diferentes, los cambios repentinos de personalidad deben tomarse en serio.

Si de repente tu gato confiado se esconde mucho más y se muestra asustadizo, es probable que esté estresado por algún cambio en el entorno. Sin embargo, también podría estar enfermo y sentirse mucho más ansioso y vulnerable.

El aumento de la agresividad es otro signo frecuente de que algo va mal. Tu gato puede gruñirte y sisearte o arremeter contra ti y arañarte si te acercas demasiado, lo que suele indicar que siente dolor. Se supone que este comportamiento debe disuadirte de cogerlo, ya que al tocarlo podrías estar empeorando su dolor.

Cambios en el comportamiento de acicalamiento

A los gatos les encanta acicalarse y son conocidos por ser criaturas extremadamente limpias. Por eso, cuando dejan de acicalarse, es señal inequívoca de que algo va mal. Normalmente, la falta de acicalamiento puede deberse a que tu gato se siente un poco indispuesto o estresado. Sin embargo, también puede ser señal de algo más grave.

Si los gatos mayores dejan de acicalarse, pueden sufrir artritis. Sus articulaciones se hinchan y se ponen rígidas, por lo que asearse podría estar causándoles dolor.

La falta de acicalamiento también puede indicar problemas dentales. Los gatos dependen de la boca y la lengua para acicalarse, por lo que cualquier problema dental podría provocarles dolor al hacerlo. Otros signos de enfermedades dentales son cuando el gato se frota los dientes contra ti o si de repente deja de comer comida seca pero sigue comiendo golosinas. También podrías notar una reducción del apetito o mal aliento.

Problemas con la caja de arena

Hay toda una serie de problemas con la caja de arena que pueden presentarse, y una lista aún mayor de posibles afecciones o lesiones detrás de estos problemas.

Si tu gato deja de utilizar la caja de arena, puede ser que padezca artritis, y entrar y salir de ella le cause dolor. Si éste es el caso, puedes optar por una caja higiénica de entrada baja para tu gato mayor.

Del mismo modo, si tiene las uñas encarnadas o se ha lesionado las patas, la arena puede resultarle incómoda para caminar.

Los gatos ancianos también pueden sufrir demencia u otra disfunción cognitiva y olvidar simplemente dónde está su caja de arena.

Por otra parte, los gatos que utilizan su caja de arena pero han empezado a orinar con mucha más frecuencia podrían padecer una infección urinaria, una enfermedad renal, hipertiroidismo o diabetes. Si apenas orinan, podría haber una obstrucción urinaria o una cistitis.

Cambios en los ojos

Dicen que los ojos son las ventanas del alma, y para los gatos no es distinto. Los ojos de tu gato muestran muchas emociones y pueden decirte cómo se siente. Por ejemplo, sus pupilas se dilatan cuando juegan o están contentos.

Por tanto, podemos utilizar los ojos de nuestro gato para ayudarnos a identificar el dolor, que suele caracterizarse por unos ojos permanentemente abiertos con las pupilas dilatadas. Pero, ¿los ojos de un gato siempre están dilatados porque siente dolor? Desgraciadamente no, también puede ser un efecto secundario de la medicación o un signo de hipertensión, ansiedad o enfermedad ocular. Sea cual sea la causa, lo mejor es que te lo revisen.

También puede haber otros cambios oculares en un gato enfermo, como párpados caídos, entrecerrar los ojos y parpadear excesivamente, o secreción anormal del ojo. Todos ellos suelen ser signo de infecciones o afecciones oculares y deben examinarse cuanto antes para evitar la ceguera.

Niveles de actividad reducidos

El letargo en los gatos suele ser señal de un problema. Puedes notar que tu gato duerme con más frecuencia o que no es tan juguetón.

La fiebre, las infecciones o las enfermedades generales son los culpables más frecuentes. Toda la energía de tu gato se destina a su sistema inmunitario, que trabaja duro para combatir la infección, por lo que simplemente no tiene energía para otras actividades.

Otra razón por la que los niveles de energía de tu gato han bajado podría ser el dolor. Los gatos artríticos serán menos activos, ya que el momento de saltar y jugar les lastima las articulaciones. Los gatos lesionados tampoco se moverán tanto y pueden parecer doloridos al caminar o saltar. Presta atención a los signos de cojera y acude al veterinario si es necesario.

CONCLUSIÓN

Como dueños de mascotas, queremos saber cuándo nuestro gato está enfermo o tiene dolor para poder aliviar su sufrimiento. Una forma de hacerlo es observar las posturas en que duermen. Sin embargo, las posturas en que duermen los gatos cuando están enfermos no difieren mucho de las posturas normales. La única excepción es la postura del pastel de carne: si tu gato duerme habitualmente encorvado, suele ser señal de que está gravemente enfermo.

Teniendo esto en cuenta, es la frecuencia de estas posturas para dormir, junto con la observación de otros cambios en el comportamiento y el lenguaje corporal de los gatos, lo que puede indicarnos si nuestros gatos están sufriendo. Por sí solas, estas cosas no significan nada, pero combinadas pueden facilitar la determinación de si tu gato es feliz y está sano o no.

Si observas algo fuera de lo normal, lleva a tu gato al veterinario para que le haga un chequeo y le devuelva su calidad de vida, su felicidad y su salud.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos Ver más

  • Responsable: Solobichos.
  • Finalidad:  Moderar los comentarios.
  • Legitimación:  Por consentimiento del interesado.
  • Destinatarios y encargados de tratamiento:  No se ceden o comunican datos a terceros para prestar este servicio. El Titular ha contratado los servicios de alojamiento web a Hetzner que actúa como encargado de tratamiento.
  • Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos.
  • Información Adicional: Puede consultar la información detallada en la Política de Privacidad.

Subir

Si continúas navegando por esta web, entendemos que aceptas las cookies que usamos para mejorar nuestros servicios. Más Información